El exmandatario avizoró una caída del poder adquisitivo, y le pasó factura a Isaac Alfie.
En su audición e la emisora M24, el expresidente de la República José Mujica lamentó los modos de proceder Isaac Alfie, director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) y advirtió que «el mercado interno pagará inexorablemente las consecuencias» del proceso alcista del dólar.
«El gobierno entrante, antes de asumir, antes que estallara esta fiebre mundial del Coronavirus (…) dos meses antes casi de asumir, le reprochaba al gobierno saliente que no ajustara las tarifas públicas», comentó.
«Seguramente no recordaban que cuando el señor (Isaac) Alfie era ministro del Partido Colorado y entregó el gobierno, tampoco ajustó las tarifas públicas y se las dejó pendientes al gobierno que entraba (…) del Frente», pero este «no hizo ningún escándalo, ningún bochinche, ningún comentario ni nada. Hizo lo que tenía que hacer y punto» pero ahora «no ha sido así» y peor aún, «con una nota un tanto dura, ofensiva, del señor Alfie conminando poco menos a que en 48 horas le mandaran determinados cálculos, no información (…) para los cuales daba la orientación general», expresó.
Posteriormente, el líder emepepista evocó el episodio en que el economista lanzó «trompadas» en el Senado, razonando que «por lo visto no puede manejar su temperamento». Según Mujica, en esta ocasión, Alfie también «podría haber utilizado otros recursos, un poco más sencillos, más respetuosos, más amigables, pero no fue así».
«Pasan los años» pero al parecer «no se puede renunciar al temperamento», consideró.
Finalmente, Mujica abordó el tema de la «tenaz sequía (que) está castigando al país, sobre todo el sur», al punto de que «se ha declarado la emergencia agropecuaria. Hay un desafío sobre todo para la cuenca lechera, espero que el gobierno tome las medidas» del caso para aliviar las dificultades de los productores.
Mujica recordó que esta situación local se producen medio de «un revoltijo internacional» dado que «por un lado baja el precio del petróleo, aunque aquí están pensando en ajustar el precio» de los combustibles. «Y abruptamente tiende a subir el precio del dólar, del oro y probablemente cae en parte el valor de algunas materias primas». «Nada es definitivo y lo que más crece en este momento es la incertidumbre», señaló.
«De todas maneras, sé perfectamente que muchos soñaban con que el dólar subiera, se olvidaron de la gente que tiene deuda contraída en dólares, y seguramente esto va afectar la pirámide salarial, pérdida del poder adquisitivo porque hay un operativo de remarque, por todas partes, de los productos de primera necesidad y naturalmente, esto va a castigar al consumo inmediato más importante de la gente», lamentó Mujica.
Para el político, es obvio que «los sectores exportadores van estar contentos por la suba en dólares» y esto «puede en algunos casos mejorar la competitividad». Pero como «no hay cena gratis, el mercado interno pagará inexorablemente las consecuencias».
«Espero que el proceso no se agrave», deseó.