“¿Usted no siente vergüenza de entregar el país?”, le preguntó una señora en Florida por las obras planificadas para la planta de UPM.
El ministro de Transporte y Obras Públicas, Víctor Rossi, volvió a ser increpado en el interior del país. Luego de las críticas cara a cara que recibió en Carmelo cuando asistió a la localidad tras el choque de tres buques pesqueros contra un puente, este jueves recibió las protestas de al menos dos ciudadanos de Sarandí Grande.
El principal motivo de la crítica es la obra para desarrollar el Ferrocarril Central, lo que está dentro de las medidas para favorecer la inversión de UPM para instalar su segunda planta de celulosa en el país.
El hecho se dio en Florida, en la sede de la Sociedad de Productores de Leche, en donde se realizó una audiencia pública sobre los impactos ambientales del nuevo proyecto. Allí también estaban el titular de la Dirección Nacional de Medio Ambiente, Alejandro Nario, y el subsecretario de Transporte, Jorge Setelich, quienes participaron en la mesa de exposiciones, según consigna La Diaria.
Rossi, como puede verse en algunas fotos que se divulgaron en redes sociales, estaba sentado entre el público que asistió a la asamblea en posición de oyente.
En determinado momento del evento, un hombre y una mujer se acercaron al ministro para increparlo.
Rossi, que al principio estaba cara a cara con el hombre y luego se alejó, decidió no enfrentar a los críticos aunque se dio vuelta cuando escuchó que quien lo increpaba dijo “qué me trancás” a uno de los asistentes que impedía que se acercaran a él. Fue en ese momento cuando el ministro abrió paso, quedó sin gente en medio de la discusión y volvió a sentarse.
“¿Usted no tiene vergüenza de entregar el país?”, le preguntó una señora enojada.