“Hizo muchas declaraciones muy agresivas antes de llegar al Gobierno, ahora está tratando de cambiar un poco ese discurso”.
El expresidente Julio María Sanguinetti señaló a Efe que espera que el cambio en el discurso político del que se convertirá en el nuevo presidente de Brasil el próximo 1 de enero, Jair Bolsonaro, -conocido por polémicas declaraciones racistas y discriminatorias-, sea auténtico.
“Bolsonaro hizo muchas declaraciones muy agresivas antes de llegar al Gobierno, ahora está tratando de cambiar un poco ese discurso y confiemos en que ello sea auténtico y se consolide”, declaró el que fue mandatario de nuestro país entre 1985-1990 y 1995-2000.
Pese a que no se atreve a hacer previsiones sobre cómo será la actuación del político brasileño, dijo que se puede “cuestionar” muchas “frases sueltas” que dio el que el excapitán del Ejército durante su campaña política.
Un ejemplo son las declaraciones que Bolsonaro dio después de visitar una comunidad de afrodescendientes, pues entre otras cosas, sostuvo que esas personas “no hacen nada” y que “ya ni para procrear sirven”.
Con respecto al racismo en general, destacó que “desgraciadamente” es una “actitud prejuiciosa que corre a lo largo de la historia del mundo” y que es una postura que en la actualidad está más latente debido a las migraciones.
Este tema también está presente en su último libro “La trinchera de Occidente: A 70 años del Estado de Israel”, una edición publicada a finales de este año donde hace un recorrido por el conflicto palestino-israelí a través de sus discursos y de los artículos que ha publicado en las últimas cinco décadas en diversos medios.
“Es una vieja historia que nace en el 48 cuando Naciones Unidas en uno de sus mejores momentos (…) crea dos Estados, el judío y el árabe”, explicó desde un despacho repleto de libros y cuadros, quien, además, detalló que “desgraciadamente los Estados árabes no aceptaron” esta división comenzando así un conflicto local que lleva siete décadas.
Primer presidente de Uruguay en visitar Israel, Sanguinetti subrayó que este enfrentamiento con el paso de los años ha ido adquiriendo un carácter cada vez mayor.
“Hoy hay un fundamentalismo islámico que declaró en su momento la guerra a todo Occidente y sus valores, de modo que lo que era y sigue siendo de algún modo un conflicto local tiene hoy una dimensión universal”, recalcó.
Con respecto al papel de Uruguay en este conflicto, Sanguinetti recordó que “tradicionalmente” el país está “inscrito en la causa del Estado de Israel” porque fue “un activo partícipe de la Comisión del los 21 que en 1947-48 crearon (en el marco de la ONU) los dos Estados”.
“En los últimos tiempos los Gobiernos del Frente Amplio han tenido actitudes diversas, menos proisraelíes”, añadió y señaló que esta es una tendencia común en los grupos de izquierda.
Asimismo, repuntó que esta inclinación también se da en los “Gobiernos populistas”, como los de Venezuela o Nicaragua, que “han cambiado completamente su actitud y hoy son propalestinos, en el sentido de apoyar incluso el terrorismo palestino y negar la existencia del Estado de Israel”.
En lo referente a los conflictos de Latinoamérica, Sanguinetti destacó algunos “eclipses” democráticos en la región producidos por Venezuela y Nicaragua.
Para Sanguinetti, Venezuela, gobernada por Nicolás Maduro, más que en una dictadura se encuentra en un “Estado totalitario”, pues pretende el “control de toda la sociedad”.
Mientras que en Nicaragua -país desde abril vive una crisis sociopolítica que ha dejado entre 325 y 545 muertos-, está recolectado cadáveres, los cuales, a su parecer, han sido “asesinados” “de un modo realmente agresivo” en “represalia a actitudes de protestas”.
“Otra nota también preocupante es el intento del presidente de Bolivia de perpetuarse y, de más allá de la Constitución, configurarse como una especie de presidente eterno”, dijo con respecto a Evo Morales, quien lleva en el poder desde 2006 y que concurrió a la reelección para las generales de octubre de 2019.
Para las elecciones de 2019, a las cuales Sanguinetti anunciará a principios del año que viene si se lanzará o no como candidato, el político augura un cambio.
“El Gobierno que salga no va a tener mayoría absoluta, o sea, que va a tener que pactar. Nosotros esperamos que haya un cambio y que en consecuencia el Frente Amplio ceda el terreno a una nueva coalición”, concluyó.