Por Daniel Spinelli.
Tras la situación de violencia que se registró en la Escuela Nº 131 de barrio La Amarilla, la Inspección Departamental de Educación Inicial y Primaria intervino en el caso y activó el protocolo que se aconseja para estos casos. El hecho disparador se trató de un incidente entre dos alumnos de la institución escolar que terminó con un de ellos internado en Pediatría del Hospital Salto.
La agresión se generó entre dos alumnos y no participaron otros niños, aunque como consecuencia de la situación se debió convocar a una emergencia móvil para asistir a uno de los pequeños.
La situación no pasó a mayores, pero activó la intervención del equipo de Escuelas Disfrutables que a partir de ahora hará un seguimiento del caso.
EL NIÑO FUE DADO DE ALTA
Tras el hecho que se hizo público en base a la denuncia que radicó la madre del niño más afectado y que se volvió viral en las redes sociales, la Inspectora Departamental de Primaria, Mtra. Roxana Hernández, consideró oportuno explicar a CAMBIO como ocurrieron las cosas. La docente dijo que fue una situación propia entre dos niños de 7 años que después del almuerzo -(ya que la Escuela 131 es una escuela de Tiempo Completo)-, estaban jugando en el patio y por una moneda de 2 pesos que había en el lugar se agredieron. Tras la agresión sufrida uno de los niños comenzó a tener vómitos y se llamó a una emergencia médica móvil que acudió hasta el lugar y trasladó al escolar a la emergencia del Hospital Salto. Según relató Hernández, los vómitos que experimentó el niño, -de acuerdo a lo expresado por el médico-, fue porque hacía muy poco que había almorzado.
De todas maneras se decidió que quedara en observación durante el resto de la tarde y noche y en la mañana de ayer fue dado de alta. La madre del pequeño se comunció con la escuela y manifestó que el niño estaba bien y que ya se encontraba en su casa. “Todo el problema fue en realidad por una moneda de 2 pesos”, dijo Hernández, quién agregó que fue un incidente propio de los niños, aunque reconoce que el hecho se agravó a partir que uno de ellos terminó internado.
ESCUELAS DISFRUTABLES
Hernández descartó que se trata de un caso de acoso escolar o bulliyng, pero aclaró que el tema no quedó en la aclaración de lo ocurrido. De inmediato en la mañana de ayer se dispuso con urgencia que los equipos de Escuelas Disfrutables, -compuestos por psicólogos y asistentes sociales-, intervinieran en la escuela y comenzaran a instrumentar un trabajo que apunta a generar talleres e instancias de concientización hacia los niños y a los padres. Este equipo estará haciendo un seguimiento del caso y aunque restan pocos días para la culminación de las clases, ya hay proyectado un trabajo más amplio para el año que viene que tiene como fin prevenir situaciones de violencia en las escuelas e involucrar a las familias.
NOTA DIARIO CAMBIO