El expresidente también lamentó que hay “demasiada gente” que “hace caso omiso” a las recomendaciones sanitarias.
El expresidente y líder del Movimiento de Participación Popular (MPP) José Mujica se refirió este lunes a la situación de la pandemia en Uruguay.
Desde su columna radial en la emisora M24, Mujica criticó al Gobierno y aseguró que habrá que “acostumbrarse” a tener más de 50 fallecidos por día por coronavirus ante la falta de medidas que restringen la movilidad y a la decisión de “demasiada gente” de no respetar las exhortaciones.
“Al parecer toda la estrategia (del Gobierno) está centrada en vacunar lo más rápido que se pueda. Al parecer tendremos que acostumbrarnos, tal vez por algunas semanas, a esta nueva normalidad de 50 y pico de muertos diarias. Porque no se pudo cumplir con la aplicación de las recomendaciones de febrero del equipo de científicos que aconseja (GACH) y no se ha podido cumplir a cabalidad, no ya por el gobierno sino por la actitud de un margen de gente que no es la mayoría pero es demasiada, que al parecer hace caso omiso (a las recomendaciones sanitarias)”, dijo.
El expresidente aseguró que se está “fallando como sociedad”, puesto que las recomendaciones “están recontra claras”.
“Al parecer es imposible privarse de un cumpleaños, de una salida, de un encuentro. Al parecer es demasiado y entonces multiplicamos el contagio. A esta altura la única apuesta que está clara: acelerar la vacuna, que no es fácil, no es sencillo. Pero mientras tanto, ¿cuánta gente quedará por el camino? Porque 50 muertos diarios en Uruguay debería ser un terremoto, no tiene antecedentes, ni aún en los momento de guerra más cruda”, manifestó.
En otra parte de su columna también se refirió a la situación global, y aseguró que la pandemia “refleja la inmensa fragilidad de los organismos internacionales”.
“La respuesta era la vacuna, hay 20 o 25 proyectos de vacuna y 10 o 15 en la prestación. Pero hay 100 laboratorios que pueden fabricar vacunas y la demanda supera largamente las posibilidades de oferta. Era lógico tratar de colectivizar el conocimiento de alguna forma y este era el papel que debía cumplir el engranaje internacional para que muchos países pudieran haber hecho vacunas”, dijo.
Si hubiera ocurrido eso, señaló, se “hubiesen ahorrado muchas muertes, pero también se hubiera aminorado el desastre de las consecuencias económicas que tienen todas las medidas que paralización de la economía que se han tomado en el mundo entero”.