El electo senador, y posible ministro de esa cartera, aseguró que el “límite” será la “vara de la ley”, y que no se trata de “golpearse el pecho” o “ejercer una expresión autoritaria”.
El electo senador Jorge Larrañaga, y factible futuro ministro del Interior, se reunió este jueves con el electo presidente, Luis Lacalle Pou, y a la salida del encuentro manifestó que la cartera del Interior del futuro Gobierno tendrá una “fuerte impronta de respeto a la autoridad y la Policía”.
Larrañaga, que no adelantó si Lacalle ya le ofreció el cargo, dijo que se continúa trabajando en el armado del gabinete, ya que es un trabajo “extremadamente complejo”.
“En lo que hace al área del Ministerio del Interior, tenemos una plena coincidencia en darle una fuerte impronta de respeto a la autoridad y a la Policía. A la delincuencia, la ley. A la población, la protección y la defensa de sus derechos. Esto nos parece central. La contracara de la impunidad no es la ausencia de crimen, sino la expresa y plena convivencia, pacífica, entre los uruguayos”, comentó.
“No voy a hablar de nombres”, dijo al ser consultado sobre la posibilidad de que Robert Parrado sea subsecretario: “Nosotros lo que queremos es poner énfasis en la necesidad de terminar con la impunidad”, añadió, y comentó que en esa “impunidad de los delincuentes” está “el miedo de la gente”.
“Y es el fracaso del Estado y el Gobierno. Eso no puede suceder. No se trata de ejercer una expresión autoritaria, o golpearse el pecho, sino de tener el límite de la vara en la ley. Por eso decimos que nos gusta la definición de Lacalle, que vamos a luchar contra la impunidad. Vamos a respaldar a la Policía, apoyarla, y proteger a la gente honesta”, enfatizó.
Larrañaga subrayó la idea de que la “ley es la ley y la vara”: “Esto es firmeza, autoridad, respeto, dialogo, convivencia pacífica y proteger a la gente honesta que trabaja y quiere vivir en paz”.
“No decimos ni mano dura ni blanda, decimos mano justa. Acá las cosas tienen que cambiar. Aquí tiene que recuperar el respeto y la convivencia pacífica, donde se respete a las personas, las vidas y los bienes. Esto se va a tener que cumplir, porque nos parece imprescindible que se haga”, sentenció.