El presidente electo salió al cruce de los dichos del emepepista sobre facilidades para la radicación de extranjeros.
Horas antes de presentar su proyecto de ley de urgente consideración ante sus socios de coalición en el futuro gobierno, el presidente electo Luis Alberto Lacalle Pou pasó por los estudios de la radio El Espectador, donde fue entrevistado por los comunicadores Raúl Ponce de León y Juanchi Hounie, en el programa Primera Mañana.
Durante el reportaje se abordaron diversos temas, entre otros cómo será en materia de formalidades la investidura del 1º de marzo.
“Yo creo en las formas. Nunca entré a la Cámara de Diputados o la de Senadores sin corbata”, expresó, dando a entender que no deberían esperarse grandes modificaciones de protocolo durante la ceremonia.
En cuanto a la actual transición, Lacalle Pou recordó que “durante la campaña y antes dijimos que no estábamos de acuerdo ni con los resultados ni con conducción dl actual gobierno, y lo sostengo. Eso no quita que las buenas transiciones sean algo tradicional en Uruguay”, expresó.
En ese contexto, señaló que la información recibida de las salientes autoridades ministeriales “es de calidad”, aunque “no necesariamente porque sea buena sino porque es abundante”, aunque “hay excepciones”.
Y siempre refiriéndose a la transición, hizo mención a la “inesperada” y largamente comentada decisión de no aumentar las tarifas públicas en enero. “Lo hicieron durante catorce años y justo en el quince cambian”, dijo.
Asimismo, hizo mención a “ministerios que dejan comprometido personal y parte de la ejecución presupuestal”.
Respecto a la interna de la denominada “coalición multicolor” , señaló que “discusiones siempre hay, el tema es el tono de esas discusiones, y ese tono ha sido muy bueno”, afirmó.
“Es muy difícil estar cien por ciento de acuerdo en todo, pero tener mecanismos de discusión es fundamental, y esos mecanismos están. Si uno a las relaciones les agrega mucha franqueza, transparencia y buen humor, la mitad del relacionamiento está ganada”, consideró.
“No tengo nada para quejarme de nadie de la coalición”, remarcó.
En cuanto a la distribución de cargos, afirmó: “Yo asigno competencias pero no diluyo mis responsabilidades. Creo que el mundo moderno está basado en la delegación de atribuciones y eso requiere confianza, pero no delego mi responsabilidad, y el pueblo no lo va a hacer tampoco”.
En cuanto al texto preliminar de la ley de urgente consideración a presentarse este miércoles al resto de la coalición, dijo que se trata de “un borrador con mayúscula y negrita”, y que existe “un mecanismo de propuesta” para que los demás partidos aporten. En ese sentido, Lacalle Pou reconoció que los 459 artículos iniciales “pueden terminar siendo 600 o 200. No tengo prurito ni complejo si la coalición rechaza muchos artículos. Ojalá no pase, pero puede pasar. No hay que poner un biombo en la negociación, tiene que ser a cartas vistas, en la vidriera”.
“No hay nada escondido, sabemos que va a haber una discusión en la opinión pública con sectores que se oponen, como con el tema de las ocupaciones” y la postura opuesta desde a central sindical. “Tenemos que cumplir con la propuesta electoral”, subrayó.
En cuanto a propuestas, Lacalle Pou dijo que hay apertura como para recibir las que provengan del Frente Amplio, y recordó que el propio presidente Tabaré Vázquez realizó dos sugerencias para la ley de urgente consideración, iniciativas que no quedaron incluidas.
“Con el presidente no tuve ninguna relación en mucho tiempo, por decisión unilateral de él. Luego (tras las elecciones) tuvimos una reunión muy cordial y de ahí en adelante henos tenido la relación que debimos haber tenido siempre”, refirió.
Luego, interrogado sobre los recientes casos de agresiones a policías para quitarles sus armas, aseguró que dichos episodios le resultaban muy llamativos.
“Me llamaron poderosamente la atención. No quiero ser contundente, porque no tengo pruebas. . . pero cuatro policías agredidos en cuatro días me parece un poco extraño”, apuntó, insistiendo en que en esos delitos “se fue a buscar específicamente a uniformados”.
“Nos llamó también la atención que (desde el Ministerio del Interior) se recomendara a los policías no estar en lugares inseguros”, criticó.
Posteriormente, el reportaje viró hacia el controvertido tema de las supuestas modificaciones normativas que el entrante gobierno llevaría a cabo para facilitar la radicación de extranjeros en el país, haciendo también más simple la tramitación de la residencia fiscal.
“Sostengo y afirmo que vamos a trabajar para que Uruguay sea un lugar donde lleguen miles de personas que quieran hacer de este su país, criar a sus hijos, trabajar e invertir,”, aseveró, y añadió que, a su entender, hay consenso más allá de colores políticos en que “a Uruguay le vendría muy bien tener 100.000 o 200.000 personas más”.
“No soy como Mujica, que dice que quiere indígenas del Altiplano porque trabajan y no se quejan. Yo soy menos clasista”, comparó.
Sobre el mismo tema, Lacalle Pou sostuvo que en un contexto regional un tanto convulso, en el Cono sur hay gente ávida de cambiar su lugar de residencia. No vamos por la plata, sino por las familias, y luego también van a invertir”, explicó.
En cuanto a la resistencia para flexibilizar los requisitos para obtener la residencia fiscal, consideró que “la herida de la crisis de 2002 hace que se complejicen las transferencias en el sistema financiero”, y respondió sin mencionarlos a los recientes dichos de Mujica, acerca de “traer cagadores argentinos”.
“Lo que yo pienso sobre Mujica no es nuevo, y lo que hacen sus afirmaciones es quizá confirmarlo. Uno espera coherencia, lo que debería significar que tus dichos, con ocho años de diferencia y desde distintos status, deberían ser las mismas. Si fuiste al Conrad a pedirle a los argentinos que se vengan a vivir, deberías luego sostener lo mismo, salvo que quieras que a tu país le vaya mal , y yo no creo que sea el caso”, atacó.
Asimismo, Lacalle Pou consideró que “es discutible si Uruguay alguna vez fue un paraíso fiscal”, y que las críticas a llos anunciados cambios, manifestados también por el presidente argentino Alberto Fernández, pueden obedecer a “una falta de comprensión de lo que estamos diciendo”.
“Vamos a modificar -y va a estar a la vista- los requisitos para obtener la residencia fiscal y vamos facilitar la radiación”, indicó el electo mandatario, insistiendo en que osos cambios “van a estar a la vista de todos, uruguayos y extranjeros”, y que nuestro país “está lejos de convertirse en un paraíso fiscal”
“Hoy, para vender un inmueble en nuestro país a un extranjero, hacer una transferencia al exterior es un trámite engorroso que complica a todos los involucrados” aseveró.
Posteriormente, se refiririó a las críticas formuladas por el actual ministro de Economía, “Astori cada vez que puede expresa su frustración. Yo para eso no tengo remedio. Hay que ver si se le cree al ministro Astori, que no cumplió nada de lo que prometió, calló cosas, no denunció, o a nosotros, que estamos diciendo lo que vamos a hacer y actuaremos en consecuencia, sin doble discurso”, dijo.