La policía inició una investigación administrativa para saber qué pasó en la Comisaría de San Antonio, donde un policía fue agredido físicamente por un hombre encapuchado. En la dependencia policial no había cámaras.
La Jefatura de Policía de Salto inició una investigación administrativa interna para conocer las circunstancias en las que ocurrieron los hechos que dejaron a un policía golpeado.
Según informaron desde el Ministerio del Interior, en la comisaría de San Antonio no hay cámaras, por lo que solo se cuenta con el testimonio del policía afectado y los datos obtenidos por Policía Científica que trabajó en el lugar después del hecho.
El policía sostuvo que un hombre encapuchado ingresó a la comisaría cuando se encontraba solo en el local, lo tomó por atrás e intentó controlarlo, pero el efectivo pudo repelerlo y tirarlo al piso. Al levantarse huyó del lugar, cruzándose en la puerta con otro encapuchado al que le dio la orden de huir. Según el testimonio ambos se fueron en dos motos sin matrículas, conducidas por otros dos delincuentes.
Desde la cartera, señalaron que en el hecho no se registró ningún tipo de amenaza verbal, ni intento de robo, por lo que se trabaja el caso como un atentado, dado que si se tratara de un copamiento los delincuentes no hubieran ingresado de a uno.
En las declaraciones realizadas para la investigación interna, el policía dijo no tener ninguna situación personal en la que pudiera enmarcarse el hecho.