El “rey de la cocaína”, uno de los 30 criminales más buscados del gobierno italiano, era esperado en Italia para juzgarlo por su actividad en la mafia.
La fuga de Rocco Morabito de Cárcel Central, ocurrida anoche, volvió a colocar al italiano en los titulares de prensa uruguayos después de varios meses.
Esperaba su extradición a Italia, por lo que es de esperar que la noticia tenga consecuencias también en el país europeo.
¿Quién es Morabito y por qué su fuga levanta tanto revuelo dentro y fuera de fronteras? Perteneció desde 1988 hasta 1994 a una famosa organización delictiva dedicada al tráfico internacional de drogas: la Ndrangheta calabresa, donde según las acusaciones de la Justicia tenía la función de organizar el transporte de droga en Italia y su distribución en Milán.
“El rey de la cocaína de Milán, atrapado luego de 23 años de fuga”, informó The Guardian cuando fue atrapado en Uruguay.
Morabito era considerado “el miembro de la mafia calabresa más buscado”, a raíz de “asociaciones con la mafia, tráfico de drogas y otros crímenes serios”, según el Ministerio del Interior de Italia. Fue uno de los líderes del clan mafioso Áfrico Nuovo.
Era buscado desde 1994, cuando pagó ocho millones de dólares por importar una tonelada de cocaína. Logró huir de la detención y desde entonces, en el’ 95, las búsquedas se extendieron al ámbito internacional. “Sólo quedó un fantasma”, indica el Corriere Della Sera.
Su nombre surgía con frecuencia en la lista de los 30 criminales más buscados por el gobierno italiano. Las últimas investigaciones lo colocaron en Sudamérica, en donde se movió con documentos brasileños, hasta que en algunas intervenciones telefónicas los encargados del procedimiento tuvieron la sospecha de haber captado su voz.
Fue detenido en agosto de 2017 en un hotel de Montevideo con su compañera, una mujer de 54 años nacida en Angola pero con pasaporte portugués. El pasaporte brasileño, a nombre de Francisco Capeletto (domiciliado en Punta del Este) le permitió conseguir documentos uruguayos, donde según su (por entonces) abogado Alejandro Balbi se había dedicado al comercio de la soja.
Sin embargo, se le incautó una pistola, un cuchillo, 13 celulares, una docena de tarjetas de crédito, varios chips para celulares, U$S 54.251, $U 2540, cuatro chequeras en dólares diferidos del Bandes, una libreta conteniendo acciones al portador por U$S 100 mil, un auto Renault Logan SAL 8819, 150 fotos tipo carnet con el rostro del detenido con diferente ropa y tonalidad de piel, un auto Mercedes Benz 050 año 2015, pasaportes a nombre de Francisco Capeletto (uno portugués), joyas varias, documentación variada.
Tras diez años de búsqueda, fue detenido al cometer un error: fue descubierto tras anotar a su hija en una escuela bajo su nombre real.