(Dr. Álvaro Lima – Diputado Frente Amplio Salto)
Estoy convencido que no sería solidario encontrar algo de oposición en el título que ha quedado estampado.
Desprenderse de un poco de confort y permitir renuncias económicas, en éste caso, nos resulta en atención a las especiales circunstancias sanitarias y epidemiológicas por las que atraviesa nuestro Uruguay; muy oportunas.
Desde Presidencia se han venido anunciando una serie de medidas que se dirigen a afrontar la crisis sanitaria y prevenir ciertas convulsiones en lo social y económico que empiezan a afectar a grandes sectores de nuestra población.
Ante ello, debemos de ser primero receptivos para comprender el alcance de algunas decisiones que se han adoptado y luego entender, que todas ellas se ejecutarán por un tiempo inicial de 60 días.
Respecto a funcionarios públicos que llegan a ser unos 300 mil aproximadamente, se han anunciado recortes en los montos de las remuneraciones que van de un 5%, 10% y 20% cuyo destino será asistir sanitariamente y en términos de ayuda material a núcleos familiares que han menguado sus ingresos considerablemente.
Entendemos muy bien que el país requiere en ésta especial coyuntura mundial de deterioro de la salud pública, adoptar decisiones excepcionales y delicadas a la sensibilidad de la gente.
En cuestión de bolsillos ajenos y orden familiar que determina un salario, se debe ser extremadamente cuidadosos y que dicha medida esté comprendida en un marco de justicia distributiva.
Parte de los ingresos del presidente, consejo de ministros, directores de entes autónomos y servicios descentralizados, jerarquías, legisladores nacionales, directores de organismos públicos entre otros; se destinan para atender ésta emergencia.
En diputados, ya lo anunciamos en el anterior encuentro, se resolvió renunciar a la partida de prensa que nos corresponde y con ello habrá mensualmente unos 3 millones de pesos para un uso adecuado de dichos montos.
Esperamos que así suceda. Y también esperamos que se contemple lo que pretenden, tanto la fuerza política del Frente Amplio que en las próximas horas será recibida por el Presidente de la República como el Secretariado del PIT CNT.
La voz se levanta para manifestar que dicho esfuerzo colectivo se solidaridad siga y continúe hacia arriba.
Si la clase trabajadora puede solidarizarse con quienes más necesitan por estas horas; de igual manera pueden los agro exportadores, los ganaderos y hacendados empresarios, consignatarios de ganado y rematadores. Y pueden, además, la banca privada, los inversores inmobiliarios, los frigoríficos o las cámara empresariales e industriales.
Lo ha expresado el Gobierno Nacional desde que se desencadenó ésta epidemia el 13 de marzo pasado. Nos ha dicho que debemos entender las medidas adoptadas y todo en interés general de la población y de la virtud de la solidaridad.
Coincidimos. La gente de acá y de todos lados de Uruguay está entendiendo. Quién pueda pensar lo contrario, no estará anteponiendo la salud de la comunidad y la vida como bien indisponible.
Pero creemos que aún falta y que quienes más capital y riqueza tienen acumulada; también deben de ser alcanzados.
Solo así habrá auténtica solidaridad global y que sea transversal a las distintas economías que confluyen en el país.
Solo así será de igual a igual. Es ahora cuando el país requiere ese esfuerzo universal. Y estamos esperando que el Presidente lo anuncie. Va bien, que siga en ese sentido y asegure la justicia de la solidaridad para hacer más llevadero el caminar.