Ocurrió en el barrio porteño de Once. El uruguayo, junto a un cómplice argentino, habían entrado a un apartamento.
“Hay ladrones! ¡Hay ladrones! ¡Están armados! ¡Por favor! ¡Por favor!”, gritaba casi suplicando un vecino desde el balcón de un edificio en el barrio de Once, en la ciudad de Buenos Aires. “Tranquilo, ya viene, ya viene”, le decía, desde abajo, un vecino que respondió al reclamo de auxilio. Los ladrones eran dos y cuando salieron por la puerta del edificio se armó una revuelta en el barrio.
Según informara el periódico Perfil, los vecinos persiguieron a los malvivientes, los atraparon y una mujer policía esposó a uno de ellos a un poste de luz. Todo eso fue fotografiado y filmado por los propios habitantes del barrio.
https://twitter.com/igonzalezprieto/status/1174648258423140352?s=20
Cuando uno de los ladrones quedó esposado se desató una suerte de venganza por mano propia y el detenido fue golpeado brutalmente con patadas en el estómago y en el pecho. También le pegaron en la cabeza. El ladrón estaba visiblemente ensangrentado.
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La mujer policía les pidió que no lo golpearan pero los vecinos que estaban allí estaban sumamente enfurecidos y no obedecían: ¡Qué no! ¡Qué le hicieron al tipo!”, gritaba. El segundo ladrón había sido capturado a la vuelta del lugar, y también golpeado.
El periodista Ignacio González Prieto publicó las imágenes en su cuenta de Twitter. El periodista contó que uno de los detenidos era argentino y el otro uruguayo. Los delincuentes habían entrado a un apartamento de una mujer y un hombre, y este último quedó atrapado en el balcón y empezó a pedir ayuda.