A partir del lunes 3 de julio, la Dirección Nacional de Aduanas dejará sin efecto la medida «Cero Kilo» que rige para las aduanas de Colonia, Carmelo, Nueva Palmira, Fray Bentos, Paysandú, Salto y Bella Unión, según informó el organismo mediante un comunicado.
La decisión se tomó al considerar la nueva coyuntura económica existente en la frontera uruguaya con la República Argentina».
La política de “Cero Kilo” fue adoptada el 5 de abril de 2013, cuando la diferencia cambiaria entre Argentina y Uruguay favorecía a Uruguay y por lo tanto alentaba las compras en el país vecino, agrega el texto oficial.
«Esta situación llevó rápidamente a comprometer la actividad de empresas y comercios del litoral del país. Por lo tanto, la medida entonces implementada, buscó promover la legalidad, el trabajo formal, la industria y el comercio nacional, además de preservar las fuentes de empleo en Uruguay», explica el comunicado.
Sin embargo, la aduana recuerda que se encuentra vigente el Decreto 572/992 de 29 de diciembre de 1994, el cual indica que si un ciudadano permanece en el exterior más de 24 horas se ampara al régimen de turista, por lo que puede ingresar hasta US$ 150 en mercaderías por las fronteras terrestres. Esta franquicia se aplica de forma individual.
REUNIÓN EN CCIS
En la noche de ayer, la directiva del Centro Comercial e Industrial de Salto se reunió como lo hace habitualmente todas las semanas, pero el tema que estuvo sobre la mesa fue la resolución de la Dirección Nacional de Aduana (DNA).
CAMBIO consultó al presidente del empresariado local, Nicolás Sant´ Anna, quién adelantó que en principio se observaría como que la situación no sería tan perjudicial como cuando se implementó, debido a que el tipo de cambio actualmente no perjudica al Uruguay. No obstante, señaló que en la reunión pactada para anoche se iba a tomar una postura oficial sobre esta decisión de la DNA.
Cabe señalar que en el 2103 los Centros Comerciales uruguayos fueron quienes exigieron al Ministerio de Economía y Finanzas y a la DNA implementar medidas que desmotivaran el alto trasiego de mercaderías que ingresaban a Uruguay desde Argentina.