¡Fotos no!
En estas horas previas a los comicios de mañana en Venezuela, diputados uruguayos de la oposición notaron un clima de “nerviosismo”, “temor” y “expectativa”, según dijeron a El Observador.
Ayer, parte de esa delegación se reunió con representantes de la Mesa de la Unidad Democrática y con la madre de Leopoldo López, el dirigente que fue condenado a casi 14 años de prisión por organizar una manifestación contra el gobierno donde hubo incidentes con fallecidos.
La señora les leyó una carta donde agradeció la presencia de casi 100 legisladores extranjeros. Les dijo también que generalmente en los circuitos donde hay observadores no se registran abusos, por lo que los diputados –entre ellos los uruguayos– serán trasladados a distintas zonas del país.
Además de candidatos opositores presos o proscriptos, también rige en la frontera con Colombia un estado de excepción que dificultará los controles.
En este marco, dos diputados de Uruguay ya tuvieron su primer incidente. En un supermercado, la guardia policial que controla la entrega de alimentos, le obligó a borrar las fotos que habían tomado.
Los diputados Mario Ayala (Alianza Nacional) y Adrian Peña (Vamos Uruguay) fueron encarados ayer en un supermercado por la llamada “Guardia del Pueblo”, una unidad policial que responde a la Presidencia de la República, quienes le obligaron, a Ayala, a borrar varias fotos que había tomado con su celular.
El legislador blanco contó a El Observador desde Caracas que estaban en un supermercado y tomaron fotos de productos alimenticios y de los precios que son “inaccesibles” para la gente.
Miembros de la Guardia del Pueblo le reclamaron por las fotos, los detuvieron unos minutos en un cuarto del comercio y le pidieron que las borrara.
El diputado les dijo que no vio ningún cartel que lo prohibiera y desconocía si había una ley en tal sentido. La respuesta que recibió fue que no hay cartel ni ley, pero el presidente Nicolás Maduro anunció por televisión que estaba prohibido y eso bastaba.
Ayala, al que vieron tomando fotos, las borró.
El diputado Peña dijo a El Observador que ayer fue el día para comprar a precios controlados arroz y pasta. La población –los que tienen la terminación 9 en su documento de identidad– podían acceder a dos paquetes.
Los almacenes y supermercados “están abastecidos” pero los precios son muy caros salvo para los productos que se incluyen en una lista que se debe comprar según los días y la terminación del documento de identidad.
El diputado colorado señaló que según testimonios que recogió, “cuando hay elecciones hay alimentos”. Una señora le contó que su sueldo son 9.000 bolívares y los porotos que compró le costaron 2.000 bolívares “porque bajaron”.
Desde la administración de Maduro se acusó a grandes importadores de especular con los precios e incluso de generar desabastecimiento.
Tensión
Ayala notó que la población “tiene temor” e incluso se niegan a decir, no por quién van a votar, sino si mañana irán a sufragar. Para el legislador blanco, “hay una campaña de hostigamiento” que deja entrever que se sabe a quién vota cada ciudadano.
Para estas elecciones, los partidos políticos de Uruguay enviaron legisladores aunque no en calidad de observadores. Los blancos mandaron a la delegación más numerosa, con 11 integrantes, los colorados enviaron a dos diputados y el Partido Independiente a uno. El Frente Amplio envió a dos diputados y a dos integrantes del Secretariado.
Antes de viajar, los legisladores del Partido Nacional dieron una conferencia donde informaron que pidieron a la Mesa Democrática de Venezuela –que reúne a la oposición– que les brinde seguridad. T
También notificaron oficialmente a la cancillería y a autoridades de Venezuela de su presencia en aquel país.
El embajador de Venezuela en Montevideo, Julio Chirino, visitó el jueves la sede del Frente Amplio donde fue recibido por el Secretariado. El diplomático dijo que no hay problemas de seguridad para los legisladores que viajaron.
También comentó que el clima político en su país es de “normalidad”.
Sin embargo, una delegación del Parlamento Europeo, luego de recibir informes de Inteligencia, canceló su viaje a Venezuela por razones de seguridad.
La campaña electoral se desarrolló en un clima de tensión en la que incluso el presidente Maduro anunció que, de ganar la oposición, la revolución bolivariana pasará a un sistema cívico-militar y movilizará a la población en las calles.
Para las elecciones de mañana están convocados casi 20 millones de venezolanos para renovar a la Asamblea Popular.
Conaprole y vinos
Los diputados Peña y Ayala preguntaron en dos supermercados de Venezuela por productos de Conaprole. Los empleados los conocían pero les dijeron que “ya no llegan”.
También notaron que en la góndola de vinos uruguayos, solo hay de Argentina.
Unasur pone atención en cierre de mesas
La misión de Unasur en las elecciones legislativas que de mañana en Venezuela pondrá “especial atención” en la hora de cierre de las mesas, en la difusión de los resultados y en el voto asistido, informó el coordinador de la delegación, el boliviano José Luis Exeni.
El expresidente del tribunal electoral boliviano opinó que “hay un criterio coincidente en el sentido de que el sistema de votación está blindado, es sólido, es muy seguro”.
La delegación de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), integrada por unos 40 técnicos, está en Venezuela desde el 16 de noviembre y desde entonces, dijo Exeni, ha estado “acompañando las diferentes fases y actividades del cronograma electoral” y “varias auditorías”.
La misión celebró encuentros con las dos principales organizaciones, la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) y el oficialista Gran Polo Patriótico (GPP).
A lo largo de la jornada de votación la misión tendrá presencia en once estados del país, en especial en Zulia y Táchira, dos entidades fronterizas con Colombia que consideró “fundamentales” porque varios municipios de las mismas están bajo el estado de excepción, una medida implementada por el Estado para luchar contra el contrabando y el crimen organizado.