La mujer secuestrada en noviembre de 1977 tenía 41 años y al momento de su desaparición estaba embarazada de su primer hijo.
A casi un año del hallazgo de restos óseos en el Batallón 14 de Toledo, el fiscal Especializado en Delitos de Lesa Humanidad, Ricardo Perciballe, informó sobre la identidad de la persona desaparecida durante el período de la dictadura (1973-1985).
Según confirmó Montevideo Portal, el cuerpo encontrado el 6 de junio de 2023 pertenece a Amelia Sanjurjo Casal, mujer de 41 años militante del Partido Comunista que al momento de su desaparición estaba embarazada de su primer hijo.
Según Sitios de Memoria, Sanjurjo trabajaba como empleada en una editorial y fue secuestrada el 2 de noviembre de 1977 en la calle, en un operativo del Organismo Coordinador de Operaciones Antisubversivas (OCOA). Estuvo presa y fue torturada en La Tablada.
Tras el hallazgo, las pruebas genéticas recabadas no habían arrojado una coincidencia estadísticamente significativa para confirmar la identidad de la víctima de la dictadura.
El informe elaborado por el laboratorio genético del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), tras el procesamiento genético de las muestras óseas, confirmaron en su momento que los restos encontrados correspondían a una mujer y que su muerte “fue violenta por acción de terceros en el contexto de privación de libertad, malos tratos o tortura”.
En rueda de prensa, el investigador señaló que para dar con la identidad se debieron obtener muestras genéticas de familiares directos de Sanjurjo, pero para eso se tuvo que recurrir a restos ubicados mayormente en Italia y España.
“En el día de hoy por suerte podemos confirmar su identidad. Ahora la causa por esa muerte que se encontraba archivada, pero vamos a presentar un escrito para volver a abrirla e investigar quienes fueron los responsables de la muerte de Sanjurjo”, dijo Perciballe.
Embarazo
En cuanto al embarazo, Perciballe en la rueda de prensa habló en condicional sobre este porque, según le explicó a Montevideo Portal, no existen pruebas más que el testimonios de familiares y amigos, quienes hablaron de un embarazo de un mes.
“El embarazo no se pudo comprobar cuando se hizo la reconstrucción del cuerpo y la causa de la muerte”, detalló el fiscal, quien agregó que, de todos modos, si estuviese comprobado “no hay posibilidad de que el bebé haya sobrevivido”.