Ocurrió en Brasil. El hombre llegó a bromear diciendo que, en caso de multa, esta sería pequeña como su hijo.
Un hombre filmó a su hijo de nueve años conduciendo a alta velocidad por la carretera MS-450 en Mato Grosso del Sur, Brasil, en la tarde del pasado domingo.
El imprudente individuo filmó a su hijo, video en el que se lo escucha decir que el pequeño es su “chofer privado” y le pide que vaya más despacio, ya que estaba circulando nada menos que a 140 km/h.
Las imágenes tuvieron gran repercusión y terminaron viralizándose en las redes sociales.
En la grabación, el padre celebra que su hijo conduzca el vehículo en un día lluvioso. Cuenta que estuvo bebiendo alcohol y que por esa razón decidió poner al pequeño al volante.
“Al menos, si nos ponen una multa, la cantidad será menor”, bromea, y luego se dirige directamente al niño: “¿Andar a 140 para qué? Ponlo a 80 y maneja por el borde de la pista”.
Luego vuelve a su monólogo y agrega: “Carretera tranquila, hoy es domingo, mi chofer cumplirá 10 años, ya puede”.
El hombre fue contactado y entrevistado por el portal noticioso G1. Interrogado, dijo que todo había sido una broma.
“Mi hijo no llegó a manejar ni cincuenta metros. Era solo para hacer una broma […], para hacer un video en el camino a Cachoeirão. Ni siquiera había otros autos”, dijo el padre.
Sin embargo, la broma podría costarle cara. De acuerdo con la normativa local, el acto de permitir o entregar la dirección de un vehículo automotor a una persona sin licencia constituye un delito de tránsito. La pena va de seis meses a un año de detención, o multa.
En declaraciones al citado medio, el inspector de la Policía Federal de Carreteras, Tércio Baggio, aclaró que conducir sin licencia es una infracción muy grave, sujeta a multa de 880 reales (unos 7000 pesos) y la retención del vehículo. Según el funcionario, en el video se aprecian dos infracciones de tránsito.
“Estamos atentos a esta situación, el padre aún no ha sido identificado oficialmente”, expresó, y detalló que entregar el auto a una persona sin libreta es una falta a las normas, y el hecho de que esa persona fuera además un menor le suma una segunda.
Baggio también señaló que por la forma en que el menor conducía el vehículo, esa podría no ser la primera vez que lo hacía. En el caso de niños, niñas o adolescentes atrapados en esta situación, quedan sujetos al cumplimiento de las medidas socioeducativas, al igual que sus padres o tutores.
“Por cierto, el niño realmente maneja el vehículo, esta no es la primera vez que lo conduce. Hay un mal ejemplo de publicitar esto en una red social, que puede influir en otras personas”, dijo.