“Este no es el punto final. Se trabaja en un camino para aumentar la celeridad en los controles”, expresó el senador nacionalista.
El Senado aprobó este miércoles el proyecto de Ley de Presupuesto Nacional. Ahora el texto vuelve a Diputados que examinará las modificaciones que se hicieron en la cámara alta.
Uno de los puntos que más discusión género en los últimos días fue un artículo que deroga la ley 19.771 que obligaba a los funcionarios públicos a presentar boletas en ocasión de la rendición de cuenta de los viáticos. Aquella norma había sido aprobada por unanimidad pero nunca llegó a aplicarse. Su vigencia había sido postergada para enero de 2021.
La propuesta generó críticas de los legisladores del Frente Amplio, que consideraron que se trataba de un retroceso en la transparencia en los gastos del Estado.
¿Cómo se justifica este cambio? En la mañana de este jueves el periodista Emiiliano Cotelo, conductor de En Perspectiva en Radiomundo, lo dialogó con el senador nacionalista Gustavo Penadés.
Penadés señaló que “las actuales autoridades, fundamentalmente de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), entendieron que era una norma demasiado engorrosa”, y aseguró que “se está trabajando en un proyecto alternativo”, que sea “más moderno y eficaz” porque la norma actual “era muy difícil de aplicar en la práctica”.
“Hay que trabajar en una cantidad enorme de excepciones en áreas del Estado donde la norma era inaplicable. Se entendió que lo mejor era dejar de postergar la norma y lisa y llanamente derogar para abocarse al trabajo sobre una nueva redacción”, prosiguió.
Además, dijo que el trabajo de contralor implicaba “dedicar una cantidad de recursos humanos y controles que eran inviables al efecto que buscaba la ley de mayor control sobre un posible uso indebido del viático de los funcionarios públicos”.
Mientras la OPP trabaja en una nueva redacción que dé solución a estos problemas, se empezará a considerar las rendiciones de cuentas de viáticos como declaraciones juradas. “Esto quiere decir que si se constata alguna irregularidad el funcionario público podría ser acusado de violentar el documento público y eso está castigado por el código penal”, explicó el senador.
Penadés descartó que con la derogación de esta ley se elimine el control sobre los viáticos. “No es que no exista control. Control existe. Ese control ahora toma la fuerza de garantizar que el funcionario público tiene una obligación mayor por ser una declaración jurada”, consideró.
Al respecto, señaló que hay distintos tipos de viáticos y que cada uno debe tener su contralor. Por ejemplo, señaló que hay algunos que responden a actividades dentro del país, como el funcionario que maneja una ambulancia y que debe hacer un traslado al interior del país. Si está 12 horas fuera de su lugar de trabajo se paga viático.
Por otro lado, hay otros viáticos que responden a jerarcas que salen en misiones oficiales a otros países. En esos casos, aseguró Penadés, “ya está tarifado, controlado, y subido a una página web”
“No es que con la derogación de esta ley se vuelve a un clima de absoluta opacidad. No es así. Lo que se está haciendo es el sistema de control anterior en muchos casos y además se le agrega una severidad mayor porque pasa a ser una declaración jurada. Este no es el punto final. Se trabaja en el camino final para aumentar la celeridad en los controles”, insistió.
Por último, el dirigente herrerista desechó la idea que “algunos senadores del Frente Amplio malintencionadamente pretenden inducir” de que se “apuesta a la opacidad”.