La investigación indica que se había testeado en nuestro país previo a embarcar hacia Argentina y sabía que el resultado era positivo.
Un juez federal argentino procesó y embargó al ciudadano argentino que vino desde Europa con coronavirus, pasó por nuestro país y volvió a Argentina infectado. El joven de 21 años fue embargado por $25.000.000.
Según los medios argentinos, la investigación indica que el joven se había testeado en nuestro país previo a embarcar hacia Argentina y sabía que el resultado era positivo. Sin embargo, este “demoró” en constatárselo a las autoridades argentinas.
Además, TN informa que no pudo constatarse que se haya dado aviso al personal de la empresa Buquebús sobre su estado de salud. Por este motivo, el juez lo embargó y procesó sin prisión preventiva como autor penalmente responsable del delito de violación de medidas adoptadas por las autoridades competentes para impedir la propagación de una epidemia”.
Pero esto no queda acá. El gobierno de la Ciudad de Buenos Aires adelantó que le reclamará el pago de 700 mil dólares por los gastos que implicó el operativo de aislamiento de los 400 tripulantes que viajaron con él. Dentro de los gastos están los alquileres de las combis, el traslado al hotel y más cosas.
A este joven de iniciales L.S se lo acusa de haber llenado la declaración jurada requerida en la aduana en la que aseguró que “no presentaba alguno de los síntomas”, pese a que se había testeado antes de regresar a su país de origen. El medio anteriormente menciona que transcendió una hipótesis de los investigadores que sostiene que el joven subió al barco de Colonia sabiendo que tenía la enfermedad, pero no lo informó a las autoridades de la nave.
Según informa la agencia Télam, de la prueba surge que la nave amarró en Buenos Aires a las 19.28 y que un minuto más tarde el joven recibió el mensaje en donde se le confirmó que el test había dado positivo. No obstante, no lo informó a las 19.40, hora en la que la autoridad sanitaria subió al buque, sino que al menos 15 minutos después.