Una investigación del comisionado parlamentario indica que el interno murió por un disparo de “munición no letal”.
El recluso que murió tras el incidente ocurrido el 9 de octubre en el Penal de Libertad falleció como consecuencia de un disparo de munición no letal efectuado presuntamente por un efectivo policial, según un informe del comisionado parlamentario para las cárceles Juan Miguel Petit.
La revuelta se produjo pasadas las 22 horas del 9 de octubre en el módulo 3 del establecimiento carcelario. En su momento, el Ministerio del Interior informó que al menos 10 internos generaron “un tumulto entre ellos” y “comenzaron a romper sus celdarios y lograron salir a uno de los patios internos”. El comunicado de la cartera indicaba que pudieron ser controlados por los guardias, que “usaron munición no letal y gas pimienta”.
En ese episodio falleció Carlos Alberto Núñez Santos, de 40 años, quien hora después del incidente se entregó a las autoridades señalando que estaba herido por “un puntazo” que recibió durante el incidente con los otros internos.
Sin embargo, una investigación realizada por el comisionado parlamentario, que incluyó la declaración de unos 40 internos del penal, concluyó en las últimas horas que la muerte de Núñez “habría sido provocada por un disparo de escopeta con munición no letal”.
En declaraciones recogidas por un comunicado de la oficina del comisionado, Petit indicó que “todo indica que no fue muerto por un corte carcelario sino por un disparo hecho contrariando las normas dadas por las autoridades”.
Petit dijo que ya derivó el informe a la Fiscalía de Libertad que investiga el caso. Además, adelantó que hará una exposición sobre el caso ante la Comisión de seguimiento carcelario del Senado para informar a los legisladores sobre “lo ocurrido, su gestación, lo que pasó y cómo se manejó el hecho”.
Para el funcionario, los hechos “nos dejan muchas y duras lecciones”.