La Dirección Nacional de Aduanas inició una investigación administrativa para saber por qué la funcionaria no controló una mercadería que tenía el máximo nivel de alerta.
Según informaron desde la Dirección Nacional de Aduanas, está en curso una investigación administrativa para saber por qué la funcionaria de iniciales S.V.C no realizó el control de la carga que viajaba con 417 kilos de cocaína.
La funcionaria declaró ante la Justicia que no lo había hecho y fue procesada sin prisión por un delito de omisión contumacial de los deberes del cargo. Como el delito prevé pena de suspensión, se determinó un cierre de fronteras, que fijara domicilio y se presentara una vez por semana ante la comisaría durante seis meses.
La documentación tenía canal rojo, el máximo nivel de alerta, que implica la necesidad de verificar si la documentación coincide con la carga física.
Este lunes la Dirección de Aduanas dio a conocer los detalles del operativo que permitió la incautación.
Según señalaron la información llegó a partir de una alerta de la AFIP en la que se advertía que venía desde el puerto de Zárate (Argentina) una embarcación en la que podía haber dos contenedores que posiblemente estuvieran contaminados con clorhidrato de cocaína.
Los contenedores que llegaron a Montevideo desde Argentina no cumplían con las características de la alerta y se advirtió posteriormente, tras la ampliación de la investigación, que la droga estaba en otro contenedor, que iba a ser embarcado en Montevideo con destino a Bélgica.
Una vez detectados los contenedores sospechosos y tras un análisis con rayos X se encontraron los fardos con cocaína, cuyo valor de venta se estima en 24 millones de dólares.